La muestra reúne piezas emblemáticas de su trabajo, así como su más reciente producción de dibujos, hechos en papel picado y con referencia a piezas prehispánicas del Templo Mayor, a partir de su experiencia en el taller que Romero realizó con motivo de la exposición de Anni y Josef Albers. Viajes por Latinoamérica (exhibida en San Ildefonso en 2007-2008).

Destaca la obra Ayate Car (1997), que marcó un giro en el trabajo de Romero, y en la que transformó un vehículo Ford, modelo Victoria 1955, recubriéndolo de tela de ayate, pintándolo al óleo con motivos iconográficos marianos
del siglo XIX, saturando
su interior con 10 mil
rosas secas.

Esta obra, basada en imágenes y técnicas artesanales mexicanas, se exhibió en InSite 97, en la ciudad de Tijuana, colocada en la frontera entre México y los Estados Unidos.

La pieza Mezquita urbana, fue presentada el año pasado en la feria internacional de ARCO, compuesta por 15 medias llantas de microbuses, gravadas con incrustaciones de hoja de oro. De sus trabajos más recientes se exhiben Trayectos encontrados, Cuadrícula en cautiverio, Espiral sin fin y Al otro lado de la velocidad, en las que enfatiza cómo es posible re-crear un objeto utilitario, en una pieza que la creación redime mediante su actualización estética y conceptual.
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